Educación híbrida, individualizada, orientada a la sustentabilidad y que priorice la salud física y emocional.
Participa la Rectora de la Universidad del Caribe, Dra. Pricila Sosa en mesa de expertos organizada por Kybernus.
Cancún, Q. Roo, México, 25 febrero 2021.-Una educación híbrida que incorpore modelos de aprendizaje no presenciales; que sea más humana, individualizada y orientada a la sustentabilidad; atención al rezago educativo y a la afectación psicoemocional del estudiantado, así como recuperar el sentido de comunidad universitaria y garantiza el cuidado de la salud en el retorno a clases presenciales, son los retos para las instituciones de educación superior, en los que coincidieron expertos, incluida la Rectora de la Universidad del Caribe, Dra. Ana Pricila Sosa Ferreira.
Durante el conversatorio “Retos en materia educativa derivados del Covid-19: Una visión desde lo local”, organizado por el programa Kybernus, se destacó que la pandemia agudizó las desigualdades que existen en el país, así como los problemas de cobertura, calidad y deserción educativas.
El subsecretario de Planeación de la Secretaría de Educación de Quintana Roo, Mtro. Jaime González Mendoza, afirmó que si bien las instituciones educativas no estaban preparadas para impartir educación en línea, la desigualdad que se agudizó con la pandemia tiene que ver más con temas estructurales, ya que en México, 94% de jóvenes de 15 años, que viven en entornos favorecidos, tienen internet; lo que contrarresta con el 29% de los que se encuentran en situación de vulnerabilidad. Esta realidad, dijo, agudiza las brechas en la calidad educativa, a pesar de los esfuerzos federales y estatales, lo que impacta las matrículas negativamente entre 8 y 10%.
Ante esta realidad, la Rectora de la Universidad del Caribe consideró que el uso más intenso de las tecnologías en la educación era una tendencia, que la pandemia aceleró. Sin embargo, afirmó que no se puede hacer un cambio radical. Señaló que si bien antes de la pandemia ya existía la tendencia de que las universidades incorporaran la educación a distancia, ahora el proceso se debe acelerar e incorporar de inmediato modelos de aprendizaje no presenciales multimodales, para lo cual ya se está trabajando con la Secretaría de Educación.
De igual manera, consideró necesario reformular los planes de estudio de las asignaturas y trabajar en crear comunidad universitaria, lo cual tiene un papel primordial para asimilar y resolver conflictos, lo que se ha dificultado por las actividades no presenciales; por lo que estacó la importancia de desarrollar en el estudiantado las habilidades blandas, necesarias para enfrentar y solucionar conflictos.
Al mismo tiempo, consideró, se debe orientar la educación a la sustentabilidad, ya que con el receso de actividades los ambientes descansaron y se pudieron regenerar. “Esa lección debemos aprenderla. Debemos poner la sustentabilidad en la base del modelo educativo y de consumo, así como la convivencia y comunidad”, afirmó.
Con ella coincidió el experto José Carlos Espinoza Lanz, en el sentido de que se deben equilibrar los enfoques hacia una educación más integral y más humana, para dejar atrás la educación en serie, que es herencia de la revolución industrial.
En ese sentido, el ex rector de la UT Riviera Maya, Jaime González, dijo que se deben atender las particularidades de estudiantes, pero también de las escuelas, ya que todas viven realidades distintas que requieren de una atención individual a su rezago educativo, pero también en infraestructura, ya que muchas incluso han sido vandalizadas. “La educación es el pilar, por eso es prioridad atender la educación en todos los niveles, orientando recursos económicos, financiaros y de personal que requieran”, concluyó.